Dieta y Cambios en la Alimentación Después de un Infarto
Cuando se ha sufrido un infarto, es necesario adoptar cambios significativos en la forma de alimentarse. Estos cambios están orientados a controlar la presión arterial, mantener el colesterol y los triglicéridos dentro de niveles normales y reducir el riesgo de un nuevo evento cardíaco.
Aunque al principio pueden parecer complicados, estos ajustes en la dieta se vuelven naturales con el tiempo, permitiendo disfrutar de alimentos saludables y cuidar del corazón al mismo tiempo.
Alimentos a Evitar Después de un Infarto
- Evitar carnes rojas con grasa. Elegir cortes magros y eliminar cualquier rastro de grasa antes de cocinar.
- Cocinar el pollo sin piel ni grasa.
- No consumir leche entera, mantequilla, crema de leche o quesos grasos.
- Limitar el consumo de yema de huevo a tres por semana, o según lo indicado por el cardiólogo.
- Evitar embutidos como salchichas y salame, ya que contienen altos niveles de grasa y sodio.
- Eliminar las frituras de la dieta.
- Reducir el consumo de harinas blancas, azúcar y alimentos industrializados ricos en sodio.
- No agregar sal extra a las comidas.
Alimentos Permitidos Después de un Infarto
- Carnes magras como pollo sin piel o cortes magros de res.
- Pescados ricos en Omega 3 como salmón, atún y sardinas.
- Vegetales crudos y cocidos.
- Frutas frescas.
- Legumbres como lentejas, garbanzos y porotos.
- Pan y pastas integrales.
- Quesos magros y sin sal.
- Nueces, almendras y otras semillas saludables.
- Aceites saludables como el aceite de oliva o de soja.
- Mermeladas sin azúcar.
- Tés como el negro, verde o rojo.
- Jugos de frutas naturales.
Adoptar un Estilo de Vida Saludable
Además de los cambios en la alimentación, es fundamental abandonar hábitos nocivos como fumar y beber alcohol, y realizar actividad física regular. El ejercicio recomendado suele ser caminar al menos 30 minutos al día, aumentando gradualmente según las indicaciones del médico.
Estos cambios no solo ayudan a prevenir nuevos infartos, sino que también mejoran la calidad de vida en general.
La alimentación juega un papel fundamental en la recuperación después de un infarto y en la prevención de futuros problemas cardíacos. Seguir una dieta adecuada puede marcar la diferencia en tu salud. Si esta información te ha sido útil, compártela para que más personas puedan conocer cómo cuidar su corazón a través de la alimentación.