El Licopeno, el pigmento que da color rojo a los tomates, podría prevenir el cáncer de próstata y lograr la regresión de algunos tumores
El Licopeno es el pigmento que otorga el color rojo a ciertas frutas y vegetales. El mayor contenido de Licopeno se encuentra en el tomate y en menor medida en sandías y pomelo rosa.
Desde el año 1970 se comenzó a observar que los hombres que consumían mayor cantidad de tomate en su alimentación presentaban menor incidencia de cáncer de próstata.
A partir de ese momento no han cesado las investigaciones científicas al respecto y todos los estudios han coincidido en que efectivamente el consumo de Licopeno reduce el riesgo de padecer cáncer de próstata. Asi como también de otros tipos de cáncer, como el de páncreas, pulmón y ovarios.
Al parecer también conseguiría la regresión de algunos tumores y podría ser utilizado como coadyuvante de los tratamientos convencionales.
¿POR QUÉ EL LICOPENO TIENE PROPIEDADES ANTITUMORALES?
Aún no existe una conclusión sobre cual es la acción del Licopeno sobre los tejidos de la próstata para evitar la formación y reproducción de células malignas, la teoría más firme es que las propiedades antitumorales del tomate se deben a sus poderosos efectos antioxidantes los cuales pueden frenar el ataque de los radicales libres sobre las células.
Pero aún sin tener en claro como actúa, está comprobado que el consumo de tomate fresco, salsas de tomate, incluso la salsa Ketchup tienen efectos antitumorales y tienen efectos especialmente beneficiosos en la prevención del cáncer de próstata.
¿CUANTO LICOPENO CONSUMIR PARA PREVENIR EL CÁNCER DE PRÓSTATA?
El Licopeno es liposoluble, esto significa que se disuelve en grasas y por lo tanto se obtendrá una mejor absorción cuando es tomado junto con una sustancia grasa, como por ejemplo con aceite de oliva.
Se obtiene mayor cantidad de esta sustancia cuando los tomates son consumidos en forma de salsas, esto se debe a que el calor produce una mayor liberación del Licopeno.
No están establecidas cuantas deben ser las cantidades diarias de Licopeno que permitirían beneficiarse de sus propiedades antitumorales, pero se estima que el consumo de tomates (frescos, ketchup, pizza, salsas, etc) como parte de la alimentación normal y aproximadamente 5 días a la semana sería suficiente para obtener sus efectos protectores.
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